Y es que, por muy lejos que estén, los extremos sí que se acaban tocando. Lo siento mucho pero, colores políticos aparte, meter miedo a la población usando argumentos tan de parvulitos como que los indignados, sin excepción, son todos unos filoetarras de rasta y timbal que no se duchan y van por la vida quemando iglesias me parece tan vergonzante como decir que todos los políticos, sin excepción (salvo los de tu partido, deduzco), son tan delincuentes como Rato, Griñán o Granados y que la democracia será con nosotros o no será.
Ver en este inicio de legislatura a PP y a Podemos actuar con el ego por las nubes y con el discurso continuo del "o yo o nadie", pensando más en las probables nuevas elecciones generales que en tratar de alcanzar acuerdos de mínimos (por muy difíciles que sean, pero para eso se les paga) por el bien del país me parece, siendo generosos, muy decepcionante. La sociedad española votó cambio (y, en consecuencia, diálogo) en las últimas elecciones así que por favor, queridos (o no) partidos políticos, tomad ejemplo y no sigáis haciendo la misma mierda de siempre.
PD: “Astuto bastardo, estás preparando un álbum de despedida”, le soltó el productor, a lo que Bowie tan solo contestó con una sonrisa. Leo esta noticia de El País y no puedo evitar emocionarme.
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