jueves, 23 de julio de 2009

Involución

Es curioso pero cuanto más tiempo libre tengo, menos inspiración me viene para escribir posts interesantes. Sin embargo, el otro día en el metro ví una... llamémosle cosa que hizo que se encendiera una bombillita sobre mi cabeza y pensase "¡POST!" automáticamente. Eso era para verlo: allí estaba saliendo del vagón una bella jovencita, con su camiseta rota del Che, sus chapitas del "No a la Guerra" (la que sea que toque ahora), su pelo mohoso, sus aros en la nariz... y una puta RATA sobresaliendo de su mochila. Ya no son Perroflautas, señoras y señores. Ahora son RATAFLAUTAS.

Y escribo esto porque no es la primera vez que veo a un especimen de éstos (los Rataflautas, digo) pululando por el metro ante las miradas de asombro intransigentes, retrógradas y fascistas del resto de la gente. No les bastaba a estos trapecistas frustrados con ducharse una vez al mes y con su moda Derelict tan ofensiva a los mínimos estándares de elegancia, no. Tenían que ir más allá y cambiar de mascota a su pobre perro (a los piojos no los tengo en cuenta) por algo más extremo, antihigiénico y repulsivo aún. Porque si la sociedad ya había acuñado para ellos el término "perroflauta" eso significaba que se habían convertido en parte del sistema, y para recuperar su esencia era imprescindible una vuelta a los orígenes. Involucionar, esto es.

No nos engañemos: Mickey Mouse, Rèmy el de Ratatouille, el Maestro Astilla y Super Ratón son sólo dibujos animados, una rata de verdad te pega un bocao en el brazo y éste se te cae a cachos a los tres días. Claro está que a esta subespecie (los Rataflautas, digo) esto no les importa ya que llevan en la piel tres pulgadas de mierda que les hacen inmunes a todo tipo de virus y bacterias, pero hay una cosa que da que pensar: si han cambiado de animal de compañía siguiendo el razonamiento anteriormente expuesto... ¿cuál será su próxima mascota cuando se acuñe el término Rataflauta en la RAE y necesiten volver a huir del sistema? ¿Irán por la calle acompañados de cucarachas? ¿De cocodrilos? ¿De zarigüeyas? ¿De larvas de mosca tsé-tsé? Esta escalada antihigiénica sería tanto o más peligrosa que la armamentística o la del precio de la gasolina. Este blog ya ha dado la voz de alarma, ahora les toca a los políticos.



¡Mirad, un sucio y asqueroso francés!

PD: mañana hablaremos de Metallica. Y de Slipknot. Y de Caminero. O no.

3 comentarios:

  1. Jajajaja... Hacía tiempo que no te leía, y has vuelto a encantarme. Eres genial. No he visto aún a ningún "Rataflauta", pero si lo hago, le daré la dirección de este blog...

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